La 15ª etapa del Tour de Francia contaba con un perfil de media montaña, con tres puertos en sus 181,5 kilómetros que iban de menor a mayor dificultad, aunque la coronación del último de ellos estaba lo suficientemente lejos como para evitar las hostilidades entre los favoritos. Con ese panorama, la lógica hacía pensar que una fuga tendría visos de tener el beneplácito del pelotón, y así fue en un grupo de 29 ciclistas que intentaron conseguir la victoria en esta jornada con final en Carcassone.
En esta escapada se coló el moteño Jesús Herrada (Cofidis), que volvió a mostrar su inteligencia al saber meterse en la fuga buena de la jornada. El ciclista conquense tiene un sexto sentido para adivinar qué corte puede contar con el visto bueno del pelotón, y volvió por segunda etapa en este Tour de Francia a estar en la fuga definitiva. Además, el perfil de la jornada también le venía bien a sus características, por lo que esta 15ª etapa la tenía marcada en rojo.
Sin embargo, los compañeros de fuga tenían mucha calidad, con algunos hombres muy fuertes en montaña. Son los casos del polaco Rafael Majka (Bora) o el italiano Domenico Pozzovivo (Bahrain), quienes se movieron en el Pic de Nôre, de 1ª categoría y último que debían superar. Al final, sus ataques dejaron un grupo de 8 ciclistas en cabeza, entre los que no pudo estar Herrada. La victoria finalmente recaería en el danés Magnus Cort (Astaná), mientras que el conquense cruzó la meta en el puesto 20, a 3:54 minutos del ganador. El pelotón finalmente llegó a 13:11 minutos del vencedor.
En la clasificación general, el ciclista de Mota del Cuervo ascendió once posiciones hasta situarse en el puesto 47, a 1:08:51 minutos del líder, el británico Geraint Thomas (Sky), quien no tuvo problemas para mantener el maillot amarillo una jornada más.