Otro día más sin premio para un Jesús Herrada que no deja de intentar llevarse un triunfo de etapa en este Tour de Francia. El ciclista moteño volvió a meterse en una fuga importante, pero finalmente ni él ni ninguno de sus compañeros escapados pudieron optar a ganar en la Grand Colombiere.
La victoria se la acabó llevando Pogacar demostrando una potencia increíble en los metros finales donde le ganó el pulso a su compatriota líder el Tour, Primoz Roglic.
Un Tour de este año que está más igualado que nunca y una etapa en la que se partía desde Lyon y se ascendía el Montée de la Selle de Fromentel y el Col de la Biche, dos puertos de primera categoría, para después enfrentarse a las curvas de la Grand Colombiere, un puerto con tramos de hasta el 11,6% y rampas máximas del 15%.
Herrada se metió en la primera media hora en una fuga de ocho en la que estaba junto a Kévin Ledanois (Arkéa-Samsic), Simon Geschke, Matteo Trentin (CCC Team), Marco Marcato (UAE Team Emirates), Niccolo’ Bonifazio (Total Direct Energie), Michael Gogl (NTT Pro Cycling) y Pierre Rolland (B&B Hotels-Vital Concept). Estos escapados consiguieron abrir un hueco importante pese a que el grupo ponía un ritmo a toda velocidad metros atrás.
Entre tanto, el campeón colombiano del Education First, Sergio Higuita, pagó caro el descuido de Bob Jungels (Deceuninck-Quick Step) , que hizo un cambio de dirección repentino a alta velocidad, y se llevó por delante al corredor que tuvo incluso que abandonar en Tour. Higuita marchaba decimosexto en la general y desde el Education First piden medidas disciplinarias para Jungels.
También se cayó el ecuatoriano Richard Caraozjunto a Hugo Hosftetter (Israel Start-Up Nation) y ambos tuvieron que apretar los dientes para engancharse al pelotón.
En las duras rampas del 22% del primer puerto del día, Simon Geschke, Piere Rolland, Michael Gogl (NTT Pro Cycling) y Jesús Herrada configuraban un cuarteto de cabeza que parecía que podría luchar por la etepa.
En pleno Col de la Biche (6,9 kilómetros al 8,9 % medio), Gogl se escapaba perseguido por Geschke, Rolland y Herrada (Cofidis) mientras por detrás Jumbo Visma aceleraba el ritmo y ponía en serio peligro la fuga. Rolland conseguía cazar a Gogl e incluso coronar en solitario perseguidos por un Herrada que incluso supo sufrir para volver a conectar en el último repecho.
Pero en el descenso este trío fue perdiendo progresivamente su ventaja debido a la velocidad que imprimía el Jumbo Visma por detrás, en una llamativa estrategia del equipo de Primoz Roglic, que en lugar de relajarse y esperar ataques de favoritos, decidieron dinamitar el ritmo en cabeza del grupo.
En el descenso, el conquense lo pasó realmente mal y fue perdiendo distancia con la cabeza hasta que a falta de 24 kilómetros fue neutralizado por el pelotón. Otro día más se quedaba sin triunfo pese a sus múltiples y valientes intentos.
Para más inri en el Cofidis, el jefe de filas Guillaume Martin, sufría una avería completando un fin de semana aciago parta él y obligando a que Herrada se pusiera el mono de trabajo para tirar de él e intentar volver a enganchar con los favoritos.
Descolgaba Rolland a Gogl, pero a pesar de los esfuerzos del francés, iba perdiendo irremediablemente distancia con un grupo de favoritos donde Wot van Aert hacía sufrir a los mejores escaladores con una fuerza endiablada.
Fruto de ello, Egan Bernal y Nairo Quintana se quedaban atrás y decían adiós a sus opciones de ganar el Tour. En apenas un kilómetro, los dos colombianos se dejaban más de un minuto con el grupo donde van Aert daba una auténtica exhibición y en el que resistían cuatro españoles: Valverde, Mas, Bilbao y Landa.
Cuando van Aert se abrió, le cogió el relevo George Bennet mientras atacaba tímidamente un Adam Yates que inmediatamente fue neutralizado. Jumbo Visma demostró el gran equipo que tiene y en el que cada corredor puede ser mejor que el anterior. Tom Dumoulin se puso con todo para dar caza al británico y estirar al grupo hasta la extenuación.
12 candidatos había a la victoria mientras Bernal ya se dejaba 4 minutos. Llegaron al último kilómetro con opciones Roglic y Pogacar. El primero lanzaba el ataque con el segundo a su rueda pero el más joven de los eslovenos mostró su potencia para llevarse su segunda etapa con tan solo 21 años.
Volvió a demostrar una potencia sobresaliente para su edad. Tremendo golpe para el campeón de la pasada edición, Egan Bernal, que acabó llegando a 7:21 del maillot amarillo.
Acabó entrando Herrada en el puesto 41 a 20’24» en un día en el que otra vez no vio recompensadas sus ganas y su pundonor. Ya son tres fugas en las que ha se ha metido y no ha podido obtener el ansiado premio de la victoria de etapa. La general queda así:
Mañana habrá un merecido descanso, pero el martes vuelve la montaña con tres etapas duras de las que probablemente saldrá el ganador del Tour de Francia. Todavía hay opciones para Herrada de luchar por una etapa y poder resarcirse de sus diversos intentos.