La Procesión del Martes Santo se ha sus pendido por la lluvia.
Durante todo el día ha estado lloviendo intermitentemente, y a la hora de la Procesión no iba a ser menos. Llevaba unas horas sin llover, pero justo cuando iba a comenzar la Procesión, comenzaron a caer unas gotas. Se decidió esperar un poco a ver si dejaba de llover.
Transcurrido un tiempo prudencial, se comprobó que la lluvia, aunque muy poca, no cesaba y se decidió suspender definitivamente la Procesión.
No obstante, y para quitarse el "gusanillo", se decidió que las Bandas de Cornetas y Tambores de Jesús Nazareno y de San Juan (ambas tocaban en la Procesión), tocasen una marcha dentro de la ermita de El Santo, y mientras, los cofrades de el Prendimiento moverían un poco las imágenes.
Esperemos que el año que viene no nos llueva y podamos disfrutar de esta Procesión.