La facultativa de 28 años, que prestaba servicio en Mota del Cuervo, es la médico más joven fallecida por COVID-19. La iniciativa ha recibido el apoyo de médicos del hospital Virgen de la Luz y del alcalde moteño, Jacobo Medianero
Las redes sociales han sido el medio utilizado para canalizar una campaña de apoyo para que sea la madre de Sara Bravo quien recoja el Premio Princesa de Asturias en nombre de los profesionales sanitarios que han combatido la pandemia. La facultativa de 28 años, que prestaba servicio en Mota del Cuervo, ha sido médico la más joven fallecida como consecuencia de la COVID-19.
La movilización ha arrancado en esta misma semana y ha estado impulsada por compañeros como Ignacio Rosell y ha recibido, entre otros, el apoyo de facultativos del hospital Virgen de la Luz de la capital conquense.
También ha trasladado de forma expresa su respaldo a esta iniciativa el alcalde de Mota del Cuervo, Jacobo Medianero, localidad donde trabajaba Sara Bravo como médico de Familia en el centro de salud en el momento de su fallecimiento a finales de marzo.